jueves, 30 de diciembre de 2010

Feliz Año Nuevo 2011


Pues eso compañeros, que el 2011, ya que seguirá siendo crítico, llegue al menos cargado de carreras y de objetivos cumplidos para todos vosotros. Y trabajo para los parados, dinero para los que no tengan suficiente, amor para todos y, sobre todo paz en el mundo.

¡¡¡qué se acaben las guerras de una puta vez!!!
Paz Mundial

Lamiéndome las heridas: Mitja Marató Picanya-Paiporta 19/12/2010

Superado el mal trago de la Marató de Castelló y mi no participación la semana siguiente pasó entre la rabia por lo ocurrido y las ganas de encontrar nuevas motivaciones y seguir adelante con más fuerza que antes. Ya el lunes cerré parte de las heridas con una intensa rodada por la Ronda Este que me llevó a recorrer alrededor de dieciocho kilómetros en algo menos de hora y media y que me dejó un buen sabor de boca porque me reafirmó en que mi estado de cara a la MCS era bueno y que ese objetivo de 3.30 estaba en mis piernas (más allá de lo que hubiera ocurrido a lo largo de esos 42 kilómetros largos). Durante la semana seguí con entrenamientos buenos, un poco por libre porque la planificación marcaba un evidente "descanso activo" pero que sin la participación en la carrera del domingo quedaba un poco desfasada.
El caso es que a la vista de los acontecimientos y de que el domingo quería hacer una salida de un par de horas al final me decidí a inscribirme en esta prueba de la "Quarta i Mitja Picanya-Paiporta" con la única intención de hacer esa salida en compañía de unos muchos compañeros de locura y de disfrutar después de un mes sin hacerlo de ese ambiente de las carreras. Y además en esta ocasión se trataba de disfrutar sin más, sin objetivos de tiempo, de ese ambiente. Amaneció el día lluvioso lo que incluso me hizo plantearme a última hora mi participación porque arrastraba un pequeño catarro y no tenía claro si era conveniente "arriesgar" pero al final pudieron más las ganas y en un ratito me presenté en la línea de salida en Picanya dispuesto a recoger el dorsal y a disfrutar un poquito de esta pequeña pasión. Después de calentar adecuadamente (por una vez y sin que sirva de precedente) me encaminé a la línea de salida y me coloqué en una zona de esas que permiten salidas tranquilas.
Sin embargo una vez se dio la salida me vi envuelto, sin saber cómo, en una pequeña vorágine que podría traducir en algo así como "cómo corre esta gente". Ya sabéis que las salidas son difíciles porque entre tanta gente se hace difícil sustraerse al ritmo de los que tienes alrededor así que cuando me quise dar cuenta habíamos dado buena cuenta del primer kilómetro en un ritmo de 4.34. ¡Qué diablos! pensé, de perdidos al río, así que decidí mantenerme en ese ritmo por lo menos durante los cinco primeros kilómetros y ver sensaciones. Dicho y hecho, el paso por el Kilómetro cinco en 22.40 dan buena cuenta del ritmo inicial que cogí. Ese ritmo aún lo mantuve un kilómetro más pero en ese momento algo de cordura llegó a mi cabeza en forma, imagino, de cansancio muscular así que decidí bajar el ritmo a partir del siete y ponerme, como era la intención inicial a ritmos cercanos a los cinco minutos el kilómetro.
Al paso por la primera vuelta
tapado por otros corredores
Y así fue, a partir de ese momento me puse en un cómodo ritmo que me permitió ir quemando metros sin demasiado esfuerzo y así cumplimos la primera vuelta al recorrido, momento que recoge la fotografía aunque apenas se me vea, en 51 minutos largos de los oficiales. Según el Garmin el paso por el diez fue en 47.16 y por el once en 52.18 así que el tiempo aproximado de la mitad de carrera estaría en algo menos de 51, siempre tendiendo en cuenta que cada vuelta era según el cacharro 10.700 largos. Como podéis ver en las fotos el tiempo seguía lluvioso, con un fina lluvia que no paró de caer en précticamente toda la prueba. A estas alturas mi catarro empezaba a darme más problemas de los iniciales y ello me planteaba dificultades adicionales. Por ello, y teniendo en cuenta además el objetivo inicialmente descrito no me planteé incrementar el ritmo, antes al contrario, pensaba en que si seguía igual al final bajaría algo más el ritmo.
Fin de etapa
con el mono superado 
La segunda vuelta se inició en ese ritmo de cinco el kilómetro y así me mantuve hasta el kilómetro dieciséis, momento en el que decidí que era el momento de bajar todavía más si cabe el ritmo y tratar de llegar a meta sin apurar más mi estado físico. Así me puse a un ritmo entre 5.20 y 5.30 que me llevaría hasta el final de carrera con el único paréntesis del medio kilómetro final, desde el 21 hasta el 21,450 que marcaba el final según el cacharro en el que me permití el lujo de un pequeño "sprint" para llegar con buena imagen delante de la enorme cantidad de gente que había en meta. Como se puede apreciar según el reloj de meta el tiempo era de 1.46.45 que según el Garmin se queda en 1.46.27. Al final me quedo con el tiempo oficial que es de 1.45.43. De todas formas insisto en que lo de menos es el tiempo; lo importante para mí era pasar un mañana en compañía de otros locos de este mundo y volver a disfrutar de la incomparable sensación de la competición, aunque sea sin ánimos de dar el máximo. Y en ese aspecto muy satisfecho; la organización muy buena y muchísima gente por el recorrido, tanto en Picanya como en Paiporta., a pesar de la lluvia que nos acompañó todo el recorrido.
En fin, podemos decir eso de prueba superada. Os dejo el habitual enlace a los datos del Garmin


De lo que pudo ser..... pero se quedó en el intento: MCS

Como muestra de lo que no pude disfrutar,
plano de la primera media
Dejábamos el relato de mis aventuras por esas sendas de Dios en la Media Maratón de Valencia, planificada desde hacía bastante tiempo como el último test serio de cara a esa bendita locura en la que me habían embarcado los amigos del Running Castelló con la inestimable colaboración de unas ganas locas de ser parte activa de esa primera Maratón Ciutat de Castelló que se debía convertir además en la primera maratón de mi corta vida como runner. El test, aunque no había satisfecho plenamente mis expectativas, podía calificarse como positivo y como un buen refuerzo de cara al difícil reto que me esperaba para el 12dic por las calles de Castellón. Superada esa etapa de la preparación solamente restaba continuar acumulando kilómetros de manera controlada y bajando paulatinamente el listón para acabar de afinar la forma de cara a la cita del año. Bueno, eso y alguna que otra carrera de montaña (Serra o Benicassim) que al final por diversas razones se truncaron y quedaron en nada. Pero nada de eso importaba si al final a las 12.30 del doce de diciembre había sido capaz de atravesar el arco de meta en el Parque Ribalta.
Sin embargo las cosas se torcieron de la manera más absurda. Podéis pensar en lesiones pero os equivocaríais. Apenas cinco días antes de la gran cita, el miércoles 8 amanecía allá por Albentosa dispuesto a dar buena cuenta de una pequeña rodada pero ya en el momento de despertar una incipiente cansancio acompañado de dolor de piernas me anunciaba que algo no iba bien. Como es natural la prudencia hizo que descartara la idea de la rodada pero un par de horas después aparecía la fiebre, en torno a los 39º, que iba a ser compañera durante un par de días. El jueves amanecía algo mejor pero la fiebre no remitía del todo así que jornada de "vacaciones forzosas" en el trabajo y a sudar en la cama. Afortunadamente durante esa jornada, en especial por la tarde, la mejora fue evidente y a última hora del día la fiebre había desaparecido lo que dejaba una puerta abierta a la esperanza en forma de ser de la partida el domingo. Para ello el planteamiento era claro: viernes de gimnasio, suavecito, y el sábado pequeña rodadita que me haría decidir sobre mi participación en el evento.
De hecho, el viernes por la tarde pude palpar el ambiente que a buen seguro después se viviría en la carrera en la Feria del Corredor adonde me acerqué, entre otras cosas, para recoger el dorsal. Allí pude compartir ilusiones y, porqué no admitirlo, miedos con compañeros en otras ocasiones de las montañas pero que, como yo, se habían hecho a la idea de formar parte de la historia de esta primera maratón por las calles de Castellón, y también con otros compañeros más habituados a la Senda Negra. Especial mención, cómo no,  a esos dos monstruos del running, Irene y Miguel con los que departí buen rato y que, no podía ser de otra forma, confesaban objetivos que al final se quedaban cortos para lo que tienen sus piernas. Después de un rato por allí salí con la convicción de que finalmente sería de la partida.....
Pero la llegada a casa me hizo toparme con la dura realidad en forma de "seny". Mónica, evidentemente, no estaba demasiado satisfecha con la posibilidad de que, pese a todo, el domingo fuera a darme semejante paliza y así me lo hizo saber (eufemísticamente hablando) de manera rotunda. Pese a mis intentos de convencerla de que hasta la mañana siguiente no iba a tomar la decisión, tan clara era su posición (probablemente acertada) de que no debía correr que al final (empujado también por algún comentario de mi hermanita del alma, que para algo le debe servir ejercer de médico) tomé la decisión en caliente de abandonar. Y claro, uno que es muy cabezota, anunciada la decisión nada me iba a hacer cambiar de idea.... MCS pasó a la historia de lo que no pudo ser y nunca fue.
De todas formas, transcurrido un tiempo en el que me he apartado de estos foros para tratar de asentarme después del cabreo inicial, debo decir que no todo ha sido malo. La preparación ahí queda y seguro que deja un importante poso de cara a la ya inminente temporada de montaña, con nuevos planteamientos y retos más exigentes. Como dije al día siguiente, en el que por cierto no pude evitar una rodada intensa por la Ronda Este, siguiendo esa línea azul verdosa que debería haber sido la guía el día antes, el objetivo que ya antes era claro de la MiM 2011 empezaba a prepararse con más fuerzas si cabe y el reto bajar de las 7.30 empezaba a tomar forma en forma de preparación.
En cuanto al asfalto, ¿qué puedo decir?, la experiencia no ha sido tan mala como pensaba y al final casi le había cogido el tranquillo. Por ello también decidí que había que cerrar el círculo iniciado el 10/01/10 por las calles de Valencia y para el nueve de enero participar a tope en el 10000 de Divina Pastora a ver cuál ha sido la mejora en este año. A partir de ahí volveré a ser Tinyo (que no Asfaltinyo como en estos momentos) y las montañas volverán a ser ese centro que, no os voy a engañar, nunca dejaron de ser.
¿Otra Maratón de asfalto?. ¿Qién sabe?. La oportunidad de ésta era evidente y la motivación se había encontrado con dos palabras: "Primera" (propia y edición) y "Castellón". Encontrar otra vez ese punto de motivación no será sencillo pero lo que es cierto es que lucharé por conseguirlo porque después de todo una conclusión es que hasta que no sea finisher en una maratón por la Senda Negra no seré un verdadero corredor popular.
Pues nada chicos, enhorabuena a todos los que participasteis en la carrera, consiguieseis o no vuestros objetivos y seguiremos viéndonos por esas montañas y carreteras del mundo.
En esta ocasión no os puedo dejar enlaces del Garmin como es habitual así que me conformaré con dejar el link a la página oficial del MCS. A pesar de la jugarreta del cambio de fechas de la Maratón de Valencia (y no quiero ser demasiado suspicaz con el tema) para el año que viene seguro que más y mejor. 

miércoles, 15 de diciembre de 2010

Maratón La Clandestina Valencia

Ya es oficial. La maratón de Valencia 2011, prevista para el domingo 20.02.2011, anunciada en Barcelona, Madrid, Estocolmo y Mende, presentada en mayo junto con Abel Antón, con las inscripciones abiertas durante meses, finalmente no se celebrará en la fecha prevista por decisión de nuestro Concejal de Deportes, D. Cristóbal Grau.
Y como a mi no me parece bien que por el capricho de un señor, al que alguien tendrá que aclararle alguna vez quién manda y quién es el mandado, no se celebre en su fecha anunciada una maratón en la que tenía puestas muchas ilusiones; como a mi, personalmente a mi, simple corredor popular, no me gusta que se impongan las decisiones, que soy desde chiquitín alérgico al “trágala”; como a mi, digo, me podrá quitar ese señor mi maratón de febrero, pero no mi dignidad y como, en definitiva, para darme un rulo de 42km. por Valencia con unos pocos cientos de amigos no me hace falta ni el Sr. Concejal, ni sus asesores, ni sus amiguetes, os convoco formalmente a la 1ª MARATÓN CLANDESTINA Y REIVINDICATIVA DE VALENCIA. .
Vamos a manifestar, de una forma lúdica, divertida, pasándolo bien, haciendo lo que nos gusta, corriendo con alegría y buen humor 42km. por Valencia nuestro enérgico rechazo a las formas en que por Don Cristóbal Grau se ha adoptado la decisión de no celebrar la próxima maratón de febrero de 2011. Por considerar que es una decisión:
 a) EXTEMPORANEA. No es admisible decidir un cambio de fechas cuando se lleva siete meses trabajando en la inicialmente anunciada, se han dedicado unos cuantas decenas de miles de euros a promocionarla, se ha hecho una presentación pública a bombo y platillo,  se han visitado hasta cuatro ferias internacionales para su difusión, se ha entregado en mano información a unos 50.000 corredores, se ha abierto la inscripción, hay decenas de corredores inscritos –la mitad de ellos extranjeros- y, sobre todo, cuando hay ya unos cuantos miles de. valencianos ilusionados con correrla en febrero próximo.
b) IRRESPETUOSA. Con algunos que llevábamos un montón de meses trabajando gratis et amores en el proyecto, con otros, sus amigos del marketing, que llevaban los mismos meses trabajando a cambio de una buena pasta al mes, con los patrocinadores de la anterior edición a quienes ni se ha consultado siquiera, con los patrocinadores y organizadores del resto de pruebas del calendario valenciano. Irrespetuosa, en definitiva, con la sociedad valenciana a cuyo servicio se les supone y, lo que es peor de todo,
c) IMPUESTA ANTIDEMOCRÁTICAMENTE. Porque no es de recibo que cuando consultada la junta Directiva del club organizador durante los últimos treinta años, ésta manifiesta que no ve viable el cambio para 2011, que, a estas alturas ya, esa edición se debe mantener en febrero, la respuesta sea decir, clara y abiertamente, como única alternativa, que se hace en noviembre ó en noviembre. Porque lo ha decidido él, como las lentejas.
Y como a unos cuantos, afortunadamente todavía unos cuantos, nos molestan bastante las imposiciones, no nos gusta el ordeno y mando y no aceptamos que las calles sean de nadie, menos de un señor al que hemos puesto nosotros de concejal a nuestro servicio, pues es por eso que vamos a salir a la calle a manifestar nuestro enérgico rechazo a las formas en que Don Cristobal ha decidido e impuesto el cambio de fecha. Porque queremos seguir creyendo que la salvaguarda de las formas es, en esencia, la salvaguarda de la democracia, porque esas cosas, que a otros les parecerán temas menores, a nosotros nos importan, por eso y por muchas deficiencias más, que el anexo se especifican, vamos a disfrutar juntos el tercer domingo de febrero de la PRIMERA MARATÓN CLANDESTINA DE VALENCIA.
Va a ser una gran fiesta. Una quedada de corredores, amigos, gente que solo necesita unas zapatillas y un parque para sentirse viva, rebelde, apasionada. No vamos a subvertir el orden constitucional, ni a instaurar la tercera república ni nada parecido. El Sr. Grau, con su autoritaria imposición, con su irrespetuoso cambio de fechas, con su extemporánea cacicada, nos ha dado una oportunidad de oro de manifestar alto y claro nuestra absoluta disconformidad pero, sobre todo, por encima de eso, nos ha regalado la ilusión de compartir una mañana de domingo en febrero única, irrepetible, inolvidable. Que no se nos olvide eso, me gustaría percibir La Clandestina en los más ilusionantes términos de oportunidad de pasarlo bien, disfrutar y seguir siendo moderadamente felices a pesar de nuestros políticos.
Agradecidos, rebeldes, apasionados, ilusionados saludos.
José Luís Ortiz Pavía (PEPO)
P.C.: El emperador no iba vestido.
NOS VEMOS EL DOMINGO 20.02.2011 A LAS 9:00 BAJO EL VELES I VENT.